El sushi es una comida milenaria, reconocida mundialmente que con su sabor nos deleita en cada pieza, veamos cuáles son sus orígenes:
En el siglo VIII los Japoneses comenzaron a utilizar el arroz para conservar el pescado, aplicaban entre capaz de arroz lonjas de pescado que se fermentaba durante varios meses, luego se podía consumir y el arroz se desechaba.
En el siglo XIV comenzaron a consumir el arroz y el pescado fermentado.
Recién en el siglo XVII un cocinero prepararó lonjas de pescado sobre bocados de arroz y agregó a estos otros vegetales.
El sushi comenzó a prepararse sin fermentar en el siglo XIX, se utilizaba como una comida rápida se comía con palillos o simplemente con las manos.
En 1820 se creó el Maki-sushi y en 1824 el Niguiri-sushi, diferentes a los que conocemos hoy en día por el tamaño de las piezas y porque el pescado era marinado en salsa de soja antes de ser preparado.
Gracias a la popularidad que tomó podemos deleitarnos con esta comida, es muy sana, liviana, nutritiva, de bajas calorías y grasas, de fácil digestión y con alta cantidad de proteínas.
Según la cultura japonesa es necesario tener en cuenta que para mantener la calidad y el sabor de las piezas debemos utilizar palillos, cubiertos de madera o simplemente la mano para consumirlas, evitando el contacto de la comida con cubiertos metálicos.
Es bueno acompañar el sushi con té verde o sake - bebida alcohólica a base de arroz fermentado.